Musaka, a mi manera.

Esta vez os propongo una receta diferente, y un tanto internacional. La musaka la mas conocida es de origen griego, y se hace con carne de cordero y berenjenas, algunos la hacen con carne de ternera, unos le ponen patata, otros no...!así que si cada uno lo hace a su gusto pues yo también...!!A cocinar, que la receta tiene tela que cortar, vamos al lío...

Ingredientes:

2 berenjenas
2 patatas medianas
750gr de Carne picada (yo mixta)
1 cebolla
Tomate frito
Vino blanco
Especias: Tomillo seco, pimienta, romero seco, canela.
Sal
Aceite

Para la Bechamel:

2 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de harina
Leche
Sal
Nuez moscada

Queso rallado.


Lo primero que tenemos que hacer es cortar las berenjenas en rodajas no muy finas, ya que tendremos que freírlas, y esto sera para la musaka lo mismo que las placas de pasta para la lasaña. Una vez cortadas las ponemos en un escurridor y les echamos un poco de sal, para que "suden" y así pierdan ese toque amargo que poseen. Las tendremos como 30 minutos más o menos

Pelamos las patatas (si no tenéis un pelador os recomiendo que os hagáis con uno, a mi me parecía una tontería y siempre pelaba con un cuchillo, pero un día me compre uno de cerámica y es una verdadera maravilla) y las cortamos en rodajas, mas o menos del mismo grosor que las berenjenas.

En una sartén echamos abundante aceite de oliva y vamos a freír las patatas, no debemos echar mas de las que caben en el diámetro de la sartén para que no se amontonen, así que lo haremos en 2 o 3 tandas. Cuando estén echas y doradas por ambos lados las sacamos y las colocamos sobre papel absorbente y las reservamos.

En otra sartén, ponemos un poco de aceite  a fuego medio-alto y ponemos a freir las berenjenas igual que hemos echo con las patatas, pero con menos aceite. Antes de ponerlas en la sartén es conveniente secarlas ya que el sudor pude hacer que el aceite caliente nos salte y corremos el riesgo de quemarnos. Cuando estén echas y doradas por los dos lados las ponemos también sobre papel absorbente y las reservamos.

Vamos ahora a preparar la carne. Para ello vamos a picar una cebolla, este es mi kit "cebollero" :P
Siempre veía que Arguiñano cuando cortaba cebolla utilizaba unas gafas, y un día haciendo cebolla caramelizada no podía parar de llorar como una magdalena, tenia cerca la bolsa del gimnasio y allí las gafas de buceo, me lave bien las manos y la cara,espere un rato y me las puse. Mano de santo, ni una lagrima!!

A lo que íbamos:
Picamos una cebolla en trozos pequeños y la ponemos a pochar en una sartén grande con un poco de aceite, a fuego medio.

Cuando este pochada, (doradita y transparente) añadimos la carne, en mi caso es carne mixta de ternera y cerdo, ya que es siempre la que compro y la que tengo por casa.

Cuando este medio echa, añadimos la sal y las especias: una cucharadita de canela, un poco de romero y de tomillo. Vamos removiendo de vez en cuando, y echamos un chorrito de vino blanco, que dejaremos que se evapore, para que pierda el alcohol. Cuando este echa añadimos 4 cucharadas de tomate frito natural, yo uso uno que me hace mi madre cuando es la época de tomates y hay excedentes en el pueblo y me lo guarda en botes ( esta de  escándalo, algún día os enseñare como hacerlo ;) ) Si no tenéis podéis añadir tomate frito de bote. Lo mezclamos con la carne y dejamos a fuego medio bajo unos 6-7 minutos para que se acaben de integrar los sabores.

Vayamos ahora con la bechamel:

La bechamel es una salsa que puede parecer complicada, y que es posible que no salga bien las primeras veces, yo al principio siempre tenia que usar la batidora porque me quedaban grumos, y luego de sabor no me salía muy allá, así que hubo un tiempo en el que la compraba ya echa...pero no me convencía...Con el tiempo y la práctica le he pillado el truco y me queda bastante bien y lo importante sin grumos. 

En una cazuela ponemos dos cucharadas grandes de mantequilla (aprox 90-100 gr)  a fuego no muy fuerte. Cuando este desecha añadimos 2 buenas cucharadas de harina, y removemos constantemente para que no queden grumos. Tenemos que dejar que la harina pierda el sabor a crudo así que estaremos removiendo unos 3-4 minutos para que no se nos queme. Esta es la textura que debe tener:

Cuando ya este echa la harina añadimos la leche. Es muy bueno que la leche este caliente, no hirviendo pero si caliente, yo la meto un par de minutos al microondas. Añadimos en primer lugar un buen vaso de leche, como la mitad aproximadamente. y removemos constantemente. Veremos que va cogiendo textura, vamos añadiendo podo a poco el resto de la leche, para que coja la textura mas adecuada para el plato, en este caso ni muy liquida ni muy espesa. Apartamos del fuego. Salamos al gusto. Y es muy común a la bechamel añadirle nuez moscada, le da un sabor muy bueno, así que también, se la añadimos al gusto.

Ya lo tenemos todo preparado para montar nuestra musaka!!

En una fuente apta para horno ponemos una base con todas las patatas, encima una base con la mitad de la berenjena y encima una capa de carne, encima otra capa con el resto de berenjenas y finalmente una ultima capa de carne. Tapamos con la bechamel. Y a gusto de cada uno podemos rallarle queso por encima o gratinarlo sin él, yo personalmente si le pongo. Y lo ponemos en el horno que habremos pre-calentado con calor arriba y ventilador a 200º hasta que esté dorado. Y LISTA!!

 Y aquí como queda al corte :)

Gracias por visitar mi blog. Puedes dejar tu comentario aquí abajo. :)